¿En la selva?

Tramo de la Ruta de Los Miliarios.

Jornada interesante la de ayer, con un camino nuevo muy bonito y divertido gracias a Fernando, que aunque no suele acompañarnos cuando lo hace siempre tiene alguna propuesta interesante; y ayer la necesitábamos, pues como es habitual nos disponíamos a emprender la marcha sin saber por donde tirar. Así que tras unos minutos de deliberación al sol de la mañana en el punto de encuentro habitual decidimos tirar hacia Peñacaballera por la vía de servicio paralela a la autovía, pista muy exigente por las pronunciadas pendientes que tiene.
Llegamos a Peñacaballera por un camino que sale desde la misma Vía de la Plata, sendero estrecho por algunos tramos y bastante cerrado, con helechos invadiéndolo y las que ya parece que no pueden faltarnos en cualquier salida: nuestras "amigas" las ortigas.
Desde Peñacaballera a Montemayor del Río por un camino que no habíamos hecho nunca, el de los Registros, muy divertido, con algún tramo más complicado por tener piedra húmeda que resbalaba y otros bastante cerrados por la vegetación, prueba evidente de lo poco transitados de muchos caminos (y prueba también del derroche de las administraciones, que muchas veces parecen no dudar en señalizar caminos y sendas olvidándose después de mantenerlos medianamente transitables, o simplemente de promocionarlos para que la gente los transite y así evitar que se pierdan entre malas hierbas). A mitad de descenso unos minutos de parón para entablar conversación con un par de paisanos que estaban recolectando setas, otro de los encantos de estas salidas domingueras.
Llegamos al final del sendero, que desemboca en la Ruta de los Miliarios que parte de Montemayor del Río, pueblo al que nos dirigimos siguiendo el curso del Río Cuerpo de Hombre y cuando alcanzamos la entrada del mismo realizamos una breve parada para valorar las opciones que tenemos para continuar la ruta; la decisión final es realizar la Ruta de los Miliarios hasta el Puente de la Malena, por lo que debemos desandar parte de lo que hemos hecho, aunque no nos importa por la belleza del paraje, y una vez en el Puente de la Malena nos dirigimos por la Vía de la Plata hasta La Finca el Molino, enlazando con el GR10 para subir por el camino de Las Umbrías hasta Béjar, donde nos esperaba una cerveza fresca para reponer parte de las fuerzas gastadas a lo largo de la mañana.

MGJ.