Vistas de Sorihuela al fondo. |
Ya puestos en situación pasamos a describir la ruta del día, inédita en algún tramo y en otros recorridos en sentido inverso al habitual, buscando la dureza del terreno pero sin dejar de disfrutar de descensos por plena sierra.
La mañana era fresca y con rachas de viento del norte que hacían bajar la sensación térmica, pero teniendo en cuenta que era el último día de las vacaciones de Semana Santa y el primero que el clima nos ha permitido disfrutar de este deporte sin miedo a mojarnos (excepto ayer sábado el resto de la semana ha estado pasada por agua), nos ha parecido perfecto.
Hemos comenzado dirigiéndonos a Navacarros, donde hemos cogido el primer tramo nuevo de subida con algún repecho realmente duro para coronar el Alto de La Hoya y bajar hasta un estanque artificial en las inmediaciones de Neila. A partir de aquí hemos ido "cumbreando" en dirección al mencionado pueblo por sendas de ganado para más adelante hacer un cambio de dirección brusco a nuestra izquierda y bajar hacia Sorihuela por la ladera contraria y siguiendo un camino estrecho pero divertido que nos ha llevado hasta Fresnedoso, donde hemos cogido un camino que lleva dirección Ledrada pero que al alcanzar la vía del tren dejamos para retroceder hacia Sanchotello, y de aquí hacia Valdesangil por la ópción más dura que conocemos, subida que nunca hemos hecho (siempre la hemos bajado) para descender por la cara opuesta disfrutando de unas vistas espectaculares. Ya sólo nos quedaba bajar a Béjar por el camino de La Glorieta y disfrutar de una cerveza sentados en una terraza, al calor del sol que ha dejado que lo disfrutemos en este último rato de la mañana.
MGJ.
Se te ha olvidado contar que Sandra se abrazó a un árbol como una anaconda...
ResponderEliminarJejeje, es que eso yo no lo vi... aunque luego sí me contó que casi se dejó la cara en el árbol (al menos la nariz, que creo que ahora la tiene un pelín más respingona).
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